Los alimentos que comemos después de hacer cualquier tipo de ejercicio físico son básicos para nuestra salud. Es un error pensar que podemos comer cualquier cosa que pillemos en la nevera, hay que tener en cuenta qué es lo que nuestro cuerpo necesita para recuperarse.
Normalmente, después de estos esfuerzos estamos cansados y no queremos algo muy pesado, pero a la vez necesitamos reponer mucha energía de forma rápida. Encontramos por lo tanto en algunas frutas nuestras mejores aliadas para recuperarnos correctamente y no estar agotados el resto del día. Necesitamos reponer los índices de glucosa de nuestra sangre; o, dicho de otra manera, nuestros músculos nos piden a gritos un rápido "chute" de energía y esto nos lo proporcionan las frutas con alto índice glucémico. Además, estos alimentos nos devuelven el agua que hemos perdido al sudar, hidratando nuestro cuerpo y haciendo que recuperemos los indispensables minerales. Vamos a chivarte cuatro frutas que sin duda cumplen estos requisitos y harán que no pierdas la motivación para seguir con tu rutina de ejercicio habitual.
No podéis dejar de tomar papaya. Esta rica fruta tropical es muy digestiva y ligera y nos ayudará a reponer fuerzas sin que nos sintamos muy llenos.
Otra fruta post-deporte perfecta son las naranjas. Sí, las grandes amigas de nuestro organismo también nos vienen muy bien para después del ejercicio. Qué plan mejor después de un duro entrenamiento que tomarse un fresco zumo de naranja recién exprimido, lleno de vitaminas, minerales y agua.
Los kiwis también tienen muchos beneficios en nuestro cuerpo después del esfuerzo físico: contienen grandes cantidades de vitamina C y potasio, además de suponer una importante fuente de antioxidantes que ayudan a combatir el posible dolor muscular. Si a veces tienes calambres musculares, esto es lo tuyo.
No podemos olvidarnos de los plátanos, la fruta estrella en cualquier dieta de deportista. Los plátanos tienen un alto índice de glucosa y para que hagan más efecto, deben tomarse bien maduros.
Y si te apetece, por qué no, hazte un batido mezclando varias de estas frutas con un poco de agua y algún endulzante natural como la miel, así puedes ir variando las mezclas y probando nuevos sabores. Simplemente, experimenta.
Fuente : Esquire